Ticket a El Paraíso con Blake Crouch
Alcanza con leer la contratapa de la primera parte de la trilogía Wayward Pines para no tener duda alguna: esta destinada a ser una serie o una serie de películas. Su autor Blake Crouch pertenece al nuevo bastión de auto publicados. Primero la legión de lectores/fanáticos online, luego los contratos con las editoriales, las traducciones, las adaptaciones, la venta de derechos. Es un organismo con un timing perfecto que todos buscan pero pocos obtienen. Los autores deben proveer de un diferencial y también de un buzz especial con sus legión de seguidores. En el camino quedan muchos y al final del mismo llegan otros. Otros como Blake Crouch.
La primera parte de la trilogía Wayward Pines inicia con El Paraíso. En este libro conocemos al agente del servicio secreto Ethan Burke que inicia una misión para encontrar a dos agentes desaparecidos. Burke sufre un grave accidente en la ruta y despierta en un hospital sin ninguna de sus cosas. Su compañero esta muerto y él esta absolutamente solo en un pueblo que parece la perfección en la tierra. Pero como ya sabemos nada es lo que parece.
Es muy complicado en la actualidad shockear a un lector o a un televidente. Nada lo shockea más que la realidad y nada lo asusta más que ver las noticias. En un mundo armado para la hiper comunicación todos estamos al tanto de las catástrofes y aberraciones a nivel mundial pero la paradoja es que poco podemos hacer para detenerlas. Internet muestra su límite con respecto a lo que concierne ser humanos. Publicar mil veces contra el capitalismo no parece ni siquiera alterarlo. Avanza, como avanza también un cambio para el cual setimos no estar preparados. Ese es un miedo que llevamos todos los que vivimos en un marco de sociedad capitalista ya sea del primer o tercer mundo, sobretodo si habitamos grandes ciudades. En cualquier momento vemos venir un zombie corriendo por 9 de Julio o nos enteramos de un brote en New York o extrañas criaturas brotaran del Támesis. El desastre esta por venir pero nunca viene. Alterados ante esas circunstancias dejamos pasar los desastres cotidianos o nos adaptamos a ellos. Menos dinero, menos trabajo, menos salud, menos educación. Crouch parece estar al tanto de toda esta paranoia y no duda en usarla a su favor.
Crouch es muy taxactivo, como certero, con respecto al comportamiendo de la sociedad en la actualidad. La gente esta al tanto de lo que pasa, no tiene como no saber lo que pasa. Pero sencillametne no le importa. Ese razonamiento tan obvio es su pivot y diferencial a la hora de narrar la destrucción de la civilización y el mundo tal cual lo conocemos. La población sabía, no le importó y en el camino se llevo puesto a todos, incluso a los que peleaban por cambiar las cosas. Esto de alguna manera lo emparenta con un gran bestsellerista Max Broosk y su serie sobre el apocalipsis zombie que ya fue llevado al cine (World War Z). Crouch destaca la falta de sensibilidad humana en una época de enormes avances tecnologicos y deja en claro como muchas veces avanzar puede ser retroceder.
No hay que buscar en Blake Crouch la prosa sofisticada de Corman McCarthy (uno de sus referentes) o la dedicada construcción de John Connolly. Lo que hay que buscar en Crouch es un entretenimiento rápido (la novela se devora en cuestión de días) con recursos sci fi y un sub texto más complejo que el texto. Para construir la saga Wayward Pines se necesito un blend de terrores sociales y profecías auto cumplidas a lo que Crouch le sumo su declarado amor por Twins Peaks. Todo esta dado para que funcione y funciona bastante bien a excepción de que Crouch se deja seducir por incluis una sub trama basada en una serie de flashbacks que nos muestran a Ethan Burke como un ex soldado detenido por Al Qaeda, recurso en extremo gastado y transitado en la ficción americana.
Esta primera entrega logra seducir lo suficiente como para preguntarse como sigue todo después de que no queda nada.
Habra que leer y saciar la curiosidad de cuan denso es ese todo y cuan lejos llega nuestro héroe Ethan Burke en su tenacidad por desubrilo.
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Wayward Pines – El Paraíso
de Blake Crouch
Destino – Áncora y Delfín
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